Caio Rodríguez, paseando el tango argentino por Alemania
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Nuestra corresponsal en Berlín, Evelina Ceballos que nos informa de la Asociación CAARNE y las realizaciones de Hans-Henner Becquer o de Fernando Miceli, entre otros artistas argentinos en la capital alemana, Berlín, esta vez nos ha propuesto viajar a Hamburgo… nos dijo “Hay que hacerle una entrevista a Caio Rodríguez, que es un cantor enorme en el escenario y un gran tipo cuando se lo trata”.
Y aquí estamos Caio… ya ves que tu compromiso es grande… pero vamos a hacer una cosa… rumbeamos para la ciudad de Pilar para que, allí situados, en laProvincia de Buenos Aires de nuestra Argentina, recuerdes aquellos años de la niñez, la adolescencia…
Hay que emoción!! ”Mí Pilar” de mis amores!!. Pero en realidad soy de un pueblito que se llama “La Lonja” que pertenece al Partido de Pilar. Mi Padre, un cantor de milongas y gaucho de la Ciudad de Guaminí, con dientes marrones por la sal del agua. De niño miraba cantar a Papá, soñando alguna vez ser como él y recuerdo como ayer a Juan y el gordo Zoilo, que por miles de años le acompañaron a Papá con esos valses y milongas camperas que adornaban nuestra tierra en aquellos años lejanos.
Mi muy querida Mamá lo amó a Papá hasta su muerte. Igual con los cambios que la vida da a la gente! Mi mamá, de origen guaraní, nació en Caapucu, República del Paraguay, donde regreso a vivir sus últimos días de vida, en su tierra natal.
Siendo hijo de emigrantes, o desterrado de sus buenas costumbres, a través de la música crecí con los poetas de la vida. Por eso lo único que dio paz a mi espíritu fue la música. Pero el que hace que nunca viva lejos, es el ”Tango”, mi mejor amigo, el que nunca me desilusionó y me acompaña siempre!
Ahora bien Caio… me parece ver por allí un diploma del Instituto José María Estrada donde dicen que eres un buen dibujante técnico… ¿Llegaste a realizar tu profesión o el tango ya te tenía ganado?
Y bueno eso fue para darle alegría a la familia que siempre esperan lo mejor de uno. Nunca llegue a ejercer mi profesión. Sólo trabajé en el proyecto de mi casa y nada más, pero sirvió de algo!
A los 20 años me llamó el Tango, y me llevó a Paraguay y Brasil, donde fui adoptado por todo ese pueblo maravilloso de amor y buenas costumbres. Nunca me imaginé el amor hacia el tango que podría ser tan profundo que marca a fuego lento el corazón!
Ahora vuelves a Buenos Aires y te paseas por escenarios de prosapia y rango, que decimos los locutores del tango, como el Café Tortoni… recorramos tu carrera allá, en esas mocedades…
Gracias a los amigos, que me abrieron las puertas en Buenos Aires y otros países. Como los ya nombrados. Todos los años los veo a esos amigos, son el tesoro que la vida me regaló!
Pero un día Caio Rodríguez dice… “Voy a volar”… ¿Porqué elegiste Alemania?… o será que Alemania te eligió a ti
Tenía una novia en Sudamérica, y no sabia como desaparecer. Su primo me dijo, ”tranqui“ yo ya te conecto con un grupo musical que viaja siempre a Europa. Y yo me dije “ya ta!!” y como la sede del grupo era en Hamburgo, vine la primera vez aquí. Y bueno… me quedé, ya ves!. Seguramente, otra vez adoptado esta vez por este maravilloso país que me dio sueños realizados en lo personal y familiar. En la práctica… todo!
Me ha dicho Evelín que además de recorrer desde Hamburgo ese país, se te suele ver por Polonia, Italia…
Si, me invitan frecuentemente a esos países donde también doy clases de Tango y dinámica del bel canto rioplatense.
Lo cierto que estamos hablando del cantor, que además eres muy bueno, haces vivir al público cada tema… pero en ti hay un músico, autor, compositor…
Creo que lo cierto es que soy simplemente un instrumento de los fantasmas tangueros que me llaman para que le escriba lo que ellos no pudieron escribir, porque la vida se los llevó antes de que la pluma luzca!
¿Te veremos por España… Portugal pronto?
Esta en proyecto. Seria maravilloso!
Ya que estamos terminando el café, no quiero irme sin que nos des tu visión del público de Alemania, no solo del bailarín de tango, también del que le gusta escucharlo…
Lo interesante de este público es que son muy exigentes y esperan algo de vos, y hay que dárselo! Hablo de los bailarines europeos, esos ciento de miles de milongueros. El otro público, sigue amando a Carlos Gardel, que por suerte y como sabrás… CADA DÍA CANTA MEJOR!!
Sabes que te digo… Evelín dijo que eras macanudo y una vez más tiene razón, te doy un abrazo y aquí estamos esperando para verte y aplaudirte, que ahora mismo te escucharemos cantar “Por una cabeza”…
Con mucho placer y no se olviden que hay una sola religión “DIOS” y un solo idioma “EL AMOR”, con cariño desde Hamburgo un abrazo de Caio Rodríguez.